domingo, 20 de marzo de 2011

África GRITA

Las amenazas de Gadafi a los países mediterráneos; Mubarak y  las revueltas que se sucedieron en Egipto; el polémico twitter de Bisbal acerca de su "brillante" comentario sobre las pirámedes; los números de muertos en Japón; la puesta en duda de la energía nuclear; el romance de Shakira y Piqué; los curas pederastas... Son muchos temas. Muchos temas que copan las pantallas, que nos acosan. Vayamos donde vayamos, alguien habla de ellos. Parece, como dice Santiago Alba, que es cierto que tenemos dirigida nuestra forma de pensar. Quien más, quien menos, pero, al fin y al cabo, somos unos borregos.

Y lo malo es que todo esto nos está tapando una realidad crucial. Estamos viviendo, posiblemente, el principio de lo que dentro de unos cincuenta años se estudie en los libros de historia. El conato de un hito, en nuestro presente, frente a nuestros ojos. Lo pasamos por alto, como si no mereciese la pena comentarlo, como si la vida sentimental del dorsal tres del Barcelona fuese más importante.

Señores, África se está despertando. 

Por fin. Después de años y años de esclavitud, unos de esclavitud oficial, otros de esclavitud desde la sombra, los africanos están rompiendo sus cadenas. Seguramente lo hayan hecho con los dientes, y sangren. Sangrarán más, no lo niego ni me alegro. Pero está despertando. Están aprendiendo la fuerza de la mayoría unida, se están desprendiendo del lastre del eterno esclavo, mordiendo los eslabones que los subyugaba aún a las manos de los blancos: sus propios dirigentes. África tensa los músculos, aprieta la mandíbula y grita. Grita que no desea la religión en el poder; grita que quiere democracia; grita que necesita líderes con principios; grita por la libertad.

Mientras, Europa se caga en los pantalones porque su niño mimado ha dado una pataleta. "Voy a bombardear el Mediterráneo, encima con las armas que vosotros mismos fabricais, gilipollas" nos amenaza. Y todos nos cubrimos la cabeza con los brazos, por si acaso cae una bomba en el jardín. La televisión nos advierte que debemos tener miedo. Nosotros obedecemos, tenemos miedo. El miedo nos nubla la visión de todo lo demás.

No nos confundamos. Estos pueblos están dando al resto del mundo una lección de humanidad, desde la desesperación e infravida que llevan, desde la sangre y las muertes, siguen en pie, gritando. El efecto dominó ha empezado, será lento, pero será. Y, cuando nuestros nietos dentro de cuarenta años nos pregunten, yo no quiero decirles a los míos que no me di cuenta de lo que ocurría porque el mítico Piqué había publicado en su Facebook una foto de un beso con una tal Shakira.

No. Yo quiero contarles que lo vi, que me preocupé, que sufrí, que me emocioné y aplaudí. Quiero contarles que la África que ellos conocen no se parecía a la África que yo conocí antes de mis veintiséis años. Quiero contarles cómo empezó, las raices, y adornarlas con bellas historias de aquellos visionarios de los que mis padres y mis abuelos me hablaron en su día; de Mandela, de Gandhi, de Martin Luther King...

Y, sí. También les diré que imaginé a Ernesto Guevara sonriendo desde la tumba, al presenciar a un grupo de borregos convertirse en gatos salvajes. Ya saben, ésos que prefieren morir atropellados en el asfalto gris de la carretera a vivir encerrados bajo la sordidez de los muros infranqueables de la casa de su amo.

8 comentarios:

  1. África se despierta y el primer mundo coge las armas. ¿Vamos a dejar que se despierte? Yo creo que no.

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  2. Yo creo que no nos va a quedar más remedio y que es bueno que se equilibren las desigualdades...

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  3. ¿Por qué vamos a querer que se equilibren las desigualdades? A nosotros no nos interesa que África se organice. Si, por ejemplo, los principales productores mundiales de petróleo controlasen el cien por cien de los bancos petrolíferos, ¿sabes lo caro que sería conducir un coche? ¿o los daños que causaría a la indrustia automovilística? El mundo está confeccionado así por algo. Ellos son más débiles...

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  4. Son SUS recursos. No hablamos de débiles y fuertes, hablamos de personas. Descubrimos la pólvora antes y el concepto de sociedad, lo que nos proporcionó la fuerza del grupo y el modo de defenderlo. Ahora que fabricamos armas para ellos, ellos las utilizan. Occidente tiene lo que se merece, la cotrapartida de lo que ha estado sembrando siglos! Es una cuestión histórica. Hasta el imperio romano cayó! Hay ciclos, debemos aceptarlo

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  5. Estoy seguro de que tú no querrías una vida con peores condiciones de las que tienes ahora. Resulta demagogo abogar por algo que ni siquiera conoces

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  6. Más demagogo resulta asegurar lo que quiero o no quiero sin conocerme, simplemente partiendo de la base de que todos debemos pensar igual que tú, ¿no?

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  7. No quería ofenderte. Me gusta mucho como escribes y eres muy interesante. Solo que veo más utopía y fuerza de juventud que realismo en las cosas que escribes

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  8. entonces, GRACIAS! Es lo mejor que podrías haberme dicho XD

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